Woody Allen habla...

“La mayor parte de la vida es trágica. Naces y no sabes por qué, estás aquí y no sabes por qué. Te vas, te mueres. Tu familia muere. Tus amigos mueren. La gente sufre. La gente vive en constante terror, el mundo está lleno de pobreza, corrupción, de guerras y Nazis y de tsunamis. El resultado al final es que tu pierdes. No puedes ganarle a la casa”. Woody Allen

martes, 8 de marzo de 2011

El gran dictador (1940), Charles Chaplin




Nos encontramos en el final de la Primera Guerra Mundial. Un soldado del ejército de Tomania salva la vida del oficial Schultz y, tras un accidente, sufre de amnesia. Tarda 20 años en recuperarse y, al salir del hospital, se encuentra con un mundo diferente, una sociedad cambiada, donde un dictador llamado Hynkel se hace con el poder de Tomania y amenaza contra el Ghetto judío. En el mismo, se encuentra la antigua barbería del protagonista. Este se enamora de Hannah, una de las mujeres del Ghetto que defiende al barbero cuando los miembros de las fuerzas de seguridad de Hynkel le cierran su negocio. Schultz reconoce al barbero y da órdenes de no molestar al Ghetto judío. Mientras, Hynkel y Napaloni, líder de Bacteria, país fascista al igual que Tomania, deciden invadir Austerlich, ambos por separado. Esto hace que los dos dictadores se vean y discutan para que no invadan el país ninguno de los dos. Hynkel acaba firmando el tratado y, desprevenidamente, invade Austerlich. Por otro lado, Schultz critica la política antisemita de Hynkel, el lleva a un campo de concentración y reanuda la opresión en el Ghetto judío. El general escapa y se esconde con el barbero. Las fuerzas de seguridad los encuentran a ambos y son enviados a un campo de concentración, de donde consiguen escapar vestidos de uniforme. Hynkel, por su gran parecido con el barbero, es detenido mientras está cazando y este otro será tratado como el dictador de Tomania. Su deber como líder de este país fascista es dar un discurso a las tropas sobre la conquista del mundo y, en lugar de eso, el barbero dice todo lo contrario, devolviendo la paz a la humanidad.

El gran dictador es la primera película hablada del cómico director y actor de cine Charles Chaplin. Este film está ambientado entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial, en la dictadura de Hitler. Hace critica al auge de los regímenes totalitarios en Europa, en concreto el de Hitler, aunque se menciona también a Mussolini. A su vez, la película supone un canto a la democracia y a la libertad.

Chaplin representa, paralelamente, la vida del dictador Hynkel y la de un barbero judío para mostrar ambos lados de lo que supuso la dictadura de Hitler en Alemania. El director deja de lado su famoso personaje Charlot, que hace peripecias y no tiene un guión importante en la película, para convertirse en Charles Chaplin en el discurso final de la misma. Los personajes tienen su inspiración en la realidad. Véase Hynkel, el dictador de Tomania, representando a Hitler y presentado como un hombre incapaz de gobernar un país. La escena de la bola del mundo con la que juega en una de las escenas más memorables del film, que acaba explotando, física y simbólicamente, en sus manos. Por otro lado, Benito Mussolini es representado como el dictador de Bacteria, Benzino Napoloni. Garbitsch, secretario del interior y ministro de propaganda de Hynkel, está inspirado en Joseph Goebbels, y el Mariscal Herring supone la representación del Mariscal Hermann Wilhelm Göring, responsable de las fuerzas aéreas y uno de los máximos dirigentes de la Gestapo. El símbolo de los nazis en la película es una doble cruz, que significa traición.

He de mencionar la famosa escena donde el dictador juega con el globo terráqueo, feliz porque se ve capaz de conquistar el mundo y expandir su imperio. Finalmente el globo explota en sus manos, símbolo de su posterior fracaso, cuando la dictadura nazi cae. Dejo aquí el link del vídeo:

http://www.youtube.com/watch?v=3ufGTd1Hpfg

El contexto político de la época impidió la propagación del mensaje de este film. La película se prohibió en Alemania, Italia, en Brasil, Argentina, Costa Rica, España, y, en general, en todos los países ocupados por los regímenes totalitarios en Europa.

En mi opinión, fantástica parodia de la dictadura de Hitler, donde cada diálogo tiene su burla hacia estos regímenes fascistas y totalitarios. El decorado y las acciones no verbales de los actores también puntualizan el humor de este magnífico director. Te hace reír al igual que reflexionar sobre el sentido de la dictadura y el odio entre las personas.

Pongo el enlace del famoso discurso final de la película:

http://www.youtube.com/watch?v=49AZc3Gjjo0

1 comentario:

  1. Veo que el blog se anima de nuevo. No hay forma más sutil de mostrar los sentimientos que el humor y la ironía aunque a veces notes el regusto amargo de la realidad. Parece mentira que lo que esta película esté parodiando sea algo que pasó en la vida real... bueno, por lo que se ve en las noticias, sigue pasando.
    Un besote

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